Cáncer de próstata: inmunoterapia
¿Qué es la inmunoterapia?
La inmunoterapia permite al sistema inmunitario combatir mejor el cáncer. También se conoce como terapia biológica. En este tratamiento se usan medicamentos para que el sistema inmunitario ataque y destruya las células cancerosas.
¿En qué casos podría usarse la inmunoterapia para el cáncer de próstata?
La inmunoterapia se puede usar en personas con ciertos tipos de cáncer de próstata.
Hay 2 clases de inmunoterapia para tratar este tipo de cáncer:
Antes de iniciar el tratamiento, se reunirá con un oncólogo médico. Es un proveedor de atención médica con formación especial para tratar el cáncer con medicamentos. El proveedor hablará con usted sobre las opciones de tratamiento y le explicará lo que puede suceder.
Terapia con vacunas
La vacuna es un tipo de medicamento que refuerza el sistema inmunitario. A menudo se aplican para prevenir infecciones. Pero existe una vacuna contra el cáncer (llamada sipuleucel-T) que refuerza el sistema inmunitario a fin de atacar el cáncer de próstata.
¿Cuándo se usa la terapia con vacunas para tratar el cáncer de próstata?
La sipuleucel-T se usa en el tratamiento del cáncer de próstata avanzado. Se usa cuando el cáncer ya no responde a la terapia hormonal, pero no causa muchos síntomas. El cáncer de próstata no se cura con la vacuna. No reduce los niveles de PSA. Pero ofrece una vida más larga a una persona con cáncer de próstata.
¿Cómo se administra la terapia con vacunas para el cáncer de próstata?
La vacuna debe elaborarse especialmente para la persona que la recibe. Se toman células inmunitarias (glóbulos blancos) de la sangre de la persona y se las envía a un laboratorio. Luego, se exponen estas células inmunitarias a una proteína presente en las células cancerosas de la próstata (llamada fosfatasa ácida prostática o PAP). Al mismo tiempo, se las expone a una sustancia química para reforzar la respuesta inmunitaria a la PAP. Gracias a esto, las células inmunitarias reconocen y atacan las células cancerosas de la próstata.
A continuación, se introducen de nuevo en el cuerpo de la persona como infusión intravenosa. Esto significa que las células se administran directamente en la sangre a través de una vena. Cuando regresan al cuerpo, estas células ayudan a otras células inmunitarias a atacar el cáncer de próstata. Este tratamiento se repite cada 2 semanas durante un total de 3 dosis.
Inhibidores de puntos de control inmunitario
El cuerpo usa determinadas proteínas de puntos de control en las células para evitar que el sistema inmunitario ataque las células sanas y normales. A veces, las células cancerosas usan estos puntos de control para evitar que el sistema inmunitario las ataque. Los inhibidores de puntos de control inmunitario son medicamentos (anticuerpos monoclonales) que obstruyen puntos de control específicos. De esa manera, el sistema inmunitario reconoce y ataca las células cancerosas.
¿Cuándo se usan los inhibidores de puntos de control inmunitario para tratar el cáncer de próstata?
Los inhibidores de puntos de control inmunitario pueden usarse en los casos de cáncer de próstata avanzado, cuando el cáncer tiene las siguientes características:
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Vuelve a crecer después de la quimioterapia
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No se puede tratar con cirugía
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Reaparece (es recurrente) luego del tratamiento
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Se propaga a otras partes del cuerpo (hace metástasis)
¿Cómo se usan los inhibidores de puntos de control inmunitario para tratar el cáncer de próstata?
Hay 2 medicamentos de inhibidores de puntos de control inmunitario para el cáncer de próstata:
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Pembrolizumab. Este medicamento sirve para personas con células cancerosas de la próstata que presenten alguno de estos cambios genéticos (mutaciones):
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Cambios en los genes de reparación (MMR, por su sigla en inglés)
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Signos de inestabilidad microsatelital (MSI, por su sigla en inglés) en el tumor
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Una carga mutacional tumoral (TMB, por su sigla en inglés) alta
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Dostarlimab. Este medicamento puede ser una opción para las personas con cáncer de próstata avanzado que presentan una deficiencia en la reparación de los errores de emparejamiento del ADN (dMMR, por su sigla en inglés).
Estos dos medicamentos actúan obstruyendo una proteína de punto de control llamada PD-1. La PD-1 se encuentra en las células inmunitarias llamadas linfocitos T. Por lo general, la PD-1 impide que los linfocitos T ataquen las células sanas y no cancerosas del cuerpo. Al obstruir esta proteína, el sistema inmunitario destruye las células cancerosas.
¿Cómo se administran los inhibidores de puntos de control inmunitario para tratar el cáncer de próstata?
Estos medicamentos se administran como infusión a través de una vena (intravenosa). Suelen administrarse una vez cada 2 o 3 semanas.
¿Cuáles son los posibles efectos secundarios de la inmunoterapia?
Los efectos secundarios dependen del tipo de tratamiento de inmunoterapia que reciba y del medicamento que se use.
Efectos secundarios de la terapia con vacunas
Si bien la vacuna se elabora a partir de sus células, aun así puede causar efectos secundarios. Suelen aparecer cerca del período de la infusión y desaparecen en unos días. Algunos de los efectos secundarios son los siguientes:
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Cansancio
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Fiebre
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Escalofríos
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Dolor de cabeza
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Dolor de espalda o en las articulaciones
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Náuseas
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Dificultades para respirar (poco frecuente)
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Presión arterial alta (poco frecuente)
Efectos secundarios de los inhibidores de puntos de control inmunitario
Estos son algunos efectos secundarios frecuentes de los inhibidores de puntos de control inmunitario:
En algunos casos, al usar estos medicamentos, el sistema inmunitario ataca otras partes del cuerpo. No suele ocurrir con tanta frecuencia. Pero puede provocar efectos secundarios graves, como daños en las siguientes partes del cuerpo:
Colabore con el proveedor de atención médica
Hable con los proveedores de atención médica sobre los efectos secundarios a los que debe prestar atención y cuándo debe llamar. Asegúrese de saber a qué teléfono llamar si tiene preguntas o problemas. ¿Hay una línea telefónica diferente para llamar durante la noche, los fines de semana y los días festivos?
Puede ser útil llevar un registro de sus efectos secundarios. Escriba cualquier cambio físico, de razonamiento y emocional que tenga. Tener una lista por escrito hará que le resulte más fácil recordar las preguntas cuando concurra a las citas. También les facilitará a usted y a su equipo de atención médica colaborar en el armado de un plan para controlar los efectos secundarios.